2.27.2016

REFORMA AGRARIA EN HONDURAS DESDE 1960 A 1972 DENTRO DE LA PERSPECTIVA ESTRUCTURALISTA


Por Isaac Jacob Trejo Toro


Paradigma Estructuralista
Estructura agraria como obstáculo para el desarrollo económico.


El papel de la agricultura en la estrategia estructuralista es múltiple: primero es sostener el proceso de industrialización por medio de divisas obtenidas por las exportaciones y destinados a financiar las importaciones de bienes de equipamiento, piezas de cambio y materias primas que la industria exige. Segundo: proporcionar un suministro constante de mano de obra barata para esa industria. Tercero: satisfacer las necesidades alimentarias de las poblaciones urbanas, evitando el incremento del precio de los alimentos nacionales y de las importaciones en este sector, con ello se facilita el mantenimiento de salarios industriales bajos y se contrarrestan los posibles problemas de escasez de divisas. Cuarto: suministrar a la industria de las materias primas que necesite. Quinto: la generación de un mercado domestico para los productos industriales. 

Desde esta perspectiva la agricultura de la época en sus condiciones era crítica por su estructura agraria latifundista y dualista, es ineficaz y es un obstáculo para la industrialización. Se alienta una reforma agraria por razones económicas y de equidad. En una estructura latifundista se desaprovechan los recursos naturales así como la fuerza de trabajo que por razón de esa ineficaz estructura muchos trabajadores rurales se encuentran desempleados. 

El incremento esperado en la producción agrícola disminuiría la necesidad de importaciones alimentarias, lo que conllevaría una mayor cantidad de divisas para continuar apoyando una estrategia de industrialización por sustitución de importaciones. Esta reforma agraria conduciría a una redistribución de los ingresos que ampliaría el mercado domestico para la industria. 

La industrialización según el estructuralismo se ve perjudicada por retrasos gubernamentales en la introducción de las reformas estructúrales e institucionales necesarias, como la modificación de la tenencia de la tierra a través de una reforma agraria. Mientras el estancamiento del sector agrícola limita el desarrollo industrial, no solo porque no se consigue suministrar en cantidad suficiente las materias primas baratas y alimentos accesibles para el mercado interno, sino que también porque el bajo poder de compra de las poblaciones rurales restringe la salida de bienes industriales en ese mismo mercado interno. 

Se cree dentro del estructuralismo que la política de industrialización por sustitución de importaciones cambia los términos del comercio domestico a favor del sector industrial, por ello se propone una política alternativa que debía insuflar el progreso técnico en la agricultura. Desviando la inversión hacia la agricultura, se pretende reducir el excedente laboral del sector, ya que las tecnologías agrícolas exigen menos capital y necesitan de más mano de obra que las industriales. 

Con todo lo anterior, como resultado se debe obtener un acenso de la productividad agraria y un nivel de vida rural como la expansión del mercado interno para los productos manufacturados. Por fin después de todo este proceso se superaría la heterogeneidad estructural y se evitaría la concentración de los beneficios y aplicaciones del progreso técnico.


Antecedentes y Origen de la reforma agraria y estructura agraria del lapso de 1960-1972.


La reforma agraria en su verdadera conceptualización y dimensión sólo se inicia a nivel de planteamiento y marco jurídico e institucional a principios de la década de los años sesenta. Pero se hablamos de acciones en el terreno, la reforma agraria se inicia a mediados de 1967.

En la reforma agraria Honduras es una respuesta a las condiciones socioeconómicas prevalecientes en el patrón minifundio y latifundio, la apropiación indebida de tierras nacionales y ejidables, la presencia de grandes multinacionales que han retenido por mucho tiempo las mejores tierras del país, la fijeza de la agricultura de subsistencia y los altos niveles de pobreza, generalmente en el área rural. 
La población rural, habitualmente marginada de todos los poderes de decisión que habían sobrevivido hasta ese momento, entonces comienzan organizarse progresivamente, hacia mediados de la década del 50 hasta constituir actualmente un sector social, con relativa autonomía y enorme peso político y social. El proceso de reforma agraria Honduras, está orientado hacia la necesidad de generalizar la propiedad de la tierra y agregar al campesino al desarrollo económico nacional. 

Este proceso es estimulado siempre en el pequeño desarrollo económico general y el bajo ingreso per cápita de la gigantesca mayoría del pueblo hondureño en el área rural. Su objetivo a largo plazo, es lograr obtener excedentes exportables que ayuden en las relaciones de mercado e intercambio con otros países y lograr un desarrollo completo del país. Esto con el fin de lograr un elevado desarrollo económico.

Observando los intentos históricos en el país de implementar una reforma agraria podemos observar las condiciones generales del país, las cuales no ofrecía un marco adecuado como para instaurar un proceso de cambio de ésta naturaleza. Faltaban dos condiciones: primero, era necesario campesinado organizado o en vías de organización capaz de respaldar un proceso reformista, y segundo, era necesario la decisión política de llevarlo a cabo seriamente.

La ley de reforma agraria de 1924, vislumbró algunas modificaciones importantes del uso y tenencia de la tierra. A través de ella se ordenó la distribución de gran parte de la que pertenece al estado, mediante la creación de los lotes de familia. Esta política de lotificación se mantuvo en el país hasta 1962, bajo la tutela de la ley de 1936.

La distribución de las tierras por sí sola no pudo generar acciones que trascendieron ése límite. La falta de medios económicos y el apoyo técnico para la explotación de la tierra se mantuvieron siempre, como barreras imposibles para el campesino.

Estas pre-reformas no solucionaron los problemas económicos y sociales que se padecía, más bien se fueron empeorando con el andar del tiempo. El campesino favorecido de la distribución de las tierras se vio obligado a vender su lote a valores miserables, buscaban trabajo salarial rurales pasaban a ser parte de grupos marginales en la urbe.

Surgimiento del Instituto Nacional Agrario (INA)


Todo lo anterior en un gran problema, por ello, la iniciativa de reforma agraria era nacional. Quien tomó la iniciativa para la reforma agraria fue el doctor Ramón Villena morales que en 1960 creó una comisión para elaborar un planteamiento al pueblo hondureño en materia de reforma agraria. Esta acción daba las líneas básicas a seguir de la reforma agraria del país. Para eso se necesitaba de la creación del instituto nacional agrario (INA). Planteamiento de la reforma agraria que se creó el instituto nacional agrario mediante decreto numero 69 promulgado el 6 de marzo de 1961. Cuando empezó, el INA trabajo con personal de otras instituciones, asignados de manera temporal. El gobierno de Honduras solicitó asistencia técnica a la OEA consistente en el envío de un grupo de técnicos al país. Ese grupo técnico se conoció como la misión 105, que trabajó también con hondureños, producto de esto surge del proyecto del Valle de agua. Este proyecto era como un ensayo para luego transportar la reforma agraria a otras partes si esta tenía éxito en dicha región.

La precaria situación del campesinado hondureño en la década de los cincuenta, empeorada de grado en grado por la gradual demanda de tierra de los campesinos, trajeron como consecuencia que el 5 de agosto de 1960 el gobierno de Honduras, presentara un primer esquema de lo que en el futuro sería la Ley de Reforma Agraria y en el mismo lado se proponía la creación de una institución autónoma con extensas facultades para resolver los problemas complejos que nacerían en la ejecución de la misma Ley

En octubre de 1961, ingresó al País la Misión 105 de la Organización de Estados Americanos (OEA) y los asesores de la Organización para la Alimentación y Agricultura (FAO), estos efectuaron labores de investigación técnico-científica en el territorio nacional, a petición de la comisión encargada de elaborar el planteamiento de la reforma agraria.

Es así, que por medio del Decreto Ley numero 69 del 6 de marzo de 1961, se creo el Instituto Nacional Agrario (INA), al que se otorgo la autoridad, entre otras, de preparar el proyecto de Ley de la Reforma Agraria, que por Decreto numero 2 del 29 de septiembre de 1962 se describe en esta lo que sería la primera Ley de Reforma Agraria.

Entonces el Instituto Nacional Agrario (INA) se vuelve una institución semi-autónoma, con personalidad jurídica y patrimonio propio (Art. 131 de la Ley de Reforma Agraria), cuya finalidad está contenida en el Artículo No. 1 de la Ley de Reforma Agraria, Decreto No. 170 del 30 de diciembre de 1974, que entró en vigencia el 14 de enero de 1975.

El Instituto Nacional Agrario (INA) se vuelve el organismo rector de la política agraria del país y sus programas y proyectos deben estar en armonía con el Plan Nacional de Gobierno.

La finalidad del INA era lograr la transformación de la estructura agraria del país, e incorporar la población rural al desarrollo integral de la nación.

Su función fundamental era dotar de tierra al campesino y estimular la organización de los beneficiarios, que permita la adopción de tecnologías tendientes a elevar el nivel de vida, aumentar la producción, la productividad y la generación de empleo en la zona rural.

Desde su creación, el INA realizo grandes esfuerzos en beneficio de los campesinos y ha sido instrumento para agilizar la distribución de la tierra, impulsando el proceso de transformación de la estructura agraria del país, en base a un sistema de tenencia y explotación que garantice la justicia social en el campo y aumente la productividad del sector agrícola. De este manera ha contribuido en la planificación y ejecución de proyectos y programas encaminados a lograr el propósito anterior y en general un mejoramiento en el nivel de vida dela población rural.

La forma de actuar del INA generalmente era, agotar todas las instancias legales y luego, si no se tenía respuesta, se organizaban los grupos campesinos para que esto se expropiara de las tierras a las que ya tenían derecho. Al ocupar los campesinos tierras nacionales, ejidales o de propiedad dudosa, el INA lo apoyaba y protegía basados en la ley. Los campesinos agarraron con entusiasmo el proceso de recuperación de tierras nacionales y ejidales, estos le dieron vida y realidad al proceso. Si los campesinos no hubieran participado activamente y trabajado en forma productiva las tierras, el proceso de recuperación habría tenido mucho sentido ni razón de ser.

Por ejemplo, en el caso de la expropiación de las tierras de la compañía azucarera Honduras S.A., el INA adoptó la instancias legales, al ver que las negociaciones no avanzaban, esta institución comenzó organizar a los campesinos y recapacitar los para que en el momento oportuno estuvieron preparados para participar cuando el INA expropiarán y tomar las tierras. Por mucho tiempo estas planificaciones en organizaciones se interpretaron como preparaciones para inversiones de tierras. Lo que sucedió fue que los campesinos apoyaron al INA de su decisión de aplicar el acuerdo de expropiación una vez que las negociaciones no daban resultados.



Primera ley de reforma agraria

La primera ley de reforma agraria fue emitida el 29 de septiembre de 1962 durante el gobierno del doctor Ramón Villena Morales. Los factores que contribuyeron la emisión de dicha ley son: el ascenso al poder de un grupo político con orientación progresista, el ascenso naciente del movimiento campesino que mediante acciones concretas de tomate tierras inició su demanda por la ejecución de la reforma agraria, en la coyuntura internacional favorable a estas reformas sociales (en este periodo el gobierno de Estados Unidos lanzó una campaña anticomunista con el fin de amortiguar este movimiento internacional contrarrestándolo con su proyecto la alianza para el progreso o revolución pacífica).

Esta ley en sí contemplaba 20 capítulos y en ellos se reflejan los objetivos de una política agraria. En esta ley se señala que las tierras ociosas en el que cumplir su función social, en otras palabras, deben ser cultivadas eficientemente de manera directa por sus propietarios o bajo su dirección, de lo contrario, el instituto nacional agrario tendría que apropiarse e impondría impuestos a quienes no cumplieran con esta ley de manera progresiva. Las tierras ocupadas que cumplieran con su función social del estado se comprometía ha dar incentivos.

La planificación y ejecución de la reforma agraria se realizo a través del instituto nacional de reforma agraria que fue fundado en este gobierno para tal objetivo. Una de las principales tareas del instituto nacional de reforma agraria era exigir la inmediata devolución de tierras nacionales o ejidales que estuviesen ilegalmente en manos de particulares o por razón de contratos incumplidos. También revisaría expedientes de tierra y exigiría a toda aquella persona que tuvieran más de lo estipulado por el título original, tendría que devolver la cantidad de tierra que no debió poseer. Además las tierras nacionales y ejidales el instituto nacional agrario iba ha tener la autoridad de hacer uso además de tierras privadas que no estuvieran cumpliendo su función social.

Un tema central de la ley lo constituyo la creación de los llamados centros de población agrícola los que estarían ubicados de preferencia en tierra nacionales. El INA impulsará la reforma agraria por medio de estos centros, brindando creación de caminos, instalaciones educativas, escolares, de salud, vivienda, etcétera.

Existe contrariedad en dicha ley desde el momento cuando se define el latifundio, la ley lo señalan ningún límite del mismo y por lo tanto una persona podría poseer tierras de forma ilimitada. Esto se sostienen el artículo 31 en el que se prohíbe la enajenación y arrendamiento de tierras ejidales o nacionales, pero, en el artículo 166, se agregó un párrafo que dice: el arrendatario que exploten suficientemente las tierras obtenidas en arrendamiento, podrá adquirir las del instituto nacional agrario a título de compra después de expirar el plazo de arrendamiento.

Esta ley recibe la oposición de los terratenientes y de las compañías bananeras por el hecho de poseer tierras ociosas potencialmente sujetas a esta operación o pago de impuestos. Una de las compañías bananeras trasnacionales comenzó a ser oposición a dicha reforma y ley. Bajo la presión del gobierno de los Estados Unidos se logró chantajear a la autoridad estatal Honduras para la redacción y modificación de dicha ley que afectaba los intereses de tal empresa norteamericana, el director del INA se ve obligado a renunciar de su cargo. El fin de la reforma agraria llega por el golpe de estado militar de 1963, por el coronel Osvaldo López Arellano.

En 1962, se produce un nuevo intento de reforma agraria, a través de la nueva ley No. 69 sin embargo, tampoco se consiguen los resultados esperados. Principalmente esta ley era criticada por su pesada estructura administrativa que se montó para proceder a la distribución de las tierras, y la falta de investigaciones previas que diera una imagen real en las necesidades del agro y el campesino.

Diez años más tarde, cuando se promovió oficialmente un decisivo impulso por transformar la estructura agraria del país a través de la promulgación del decreto número 8 del 26 de diciembre de 1972. Por medio de esa legislación se establece en arrendamiento forzoso de tierras; permitida por el instituto nacional agrario, asentara más de 625 grupos campesinos, compuestos por 23.000 familias.

El decreto número 8 se ve complementado posteriormente por el plan nacional de reforma agraria, en su implementación se promulgó el decreto ley No. 170 de reforma agraria.

La situación de la tenencia de la tierra para la explotación agropecuaria en el país en 1973 era la siguiente: el 46% era de propiedad privada, el 10% de la propiedad nacional, el 16% de propiedad ejidal, el 5% arrendado, y el 22% de formas mixtas de trabajo.

Surgimiento del movimiento campesino 


Por la misma existencia de la estructura agraria latifundista-minifundista, se provocó una incomodidad de parte de los campesinos, entonces comienza emerger el movimiento campesino. Los estudiantes universitarios, estimulados por el triunfo de la revolución cubana y por la naturaleza del proceso de reforma agraria impulsada por el régimen de Fidel Castro, también se agregaron activamente a esta demanda contribuyendo a la organización de los campesinos que vivían en áreas de conflictos agrarios y ayudandoles en el planteamiento y solución de sus conflictos de tierras.

Para responder a la creciente presión campesinos, el doctor Villena morales anunció en una convención del Partido Liberal realizada en 1960 en el mes de abril, presentó entonces el bosquejo de una reforma agraria. El planteamiento de este bosquejo decía que siendo Honduras un país con abundantes tierra pública y con extensas áreas cultivables, escasa densidad demográfica, la reforma agraria podría iniciarse utilizando primordialmente tierras nacionales y ejidales. 

Una indicación de la importancia de la presión campesina en la iniciativa institucionalizadora a que se hace referencia se encuentren el hecho de que uno de los objetivos declarados del proceso de reforma agraria enunciada el planteamiento era suavizar los conflictos de clases entre los que poseen tierras y los que carecen de ellas.

Como se sabe, la ley de reforma agraria de 1962 fue emitida el 29 de septiembre de ese año. Esta ley declaró como patrimonio fundamental de la reforma agraria hondureña las tierras nacionales, ejidales y ociosas de propiedad privada. El presidente Villena morales afirmó el primer ejemplar de esta ley en la Lima. Los predios del edificio del sector terco, y se le entregó simbólicamente al presidente de la asociación nacional de campesinos de Honduras, (ANACH); organización campesina que él había contribuido fundar. Este acto debe ser visto como una indicación de la conciencia que tenía el presidente Villena morales de que para que se pudiera llevar a cabo un proceso de reforma agraria moderado, se requería de una cierta presión de apoyo campesino organizado, que él mismo se encargó de institucionalizar al otorgarle cierto patrocinio gubernamental y reconocimiento legal al ANACH. La ANACH recibió su personería jurídica apenas dos meses después de haber sido fundada.

la ANACH había sido precedida en su fundación por el comité de unificación campesina, más tarde conocido como la federación nacional de campesinos de Honduras (FENACH). Este comité central de unificación campesina fue fundado por los campesinos de Guaymas, Guanchias y otras aldeas norteñas que mantenían conflictos agrarios en octubre de 1961. El comité de unificación campesina fue rebautizado como la FENACH porque veía como políticamente riesgosa la autonomía de la acción gubernamental de que hacía gala esta organización campesina y las violentas disputas de tierras que mantenían con la Tela. R.R.C. Villeda morales temía, con razón, al enorme potencial político que esta multinacional bananera disfrutaba aquellos días. Parte considerable de la presión campesina era sido a la hora del inicio del proceso de reforma agraria procedió de los campesinos que un día decidieron fundar el comité central de unificación campesina y que más tarde decidieron rebautizado a su organización con el nombre de federación nacional de campesinos de Honduras (FENACH).

A lo largo del proceso de reforma agraria, ha sido la presión campesino la que ha obligado al INA a buscar soluciones a los problemas del agro. Las movilizaciones en organizaciones campesinas se lograron porque en aquellos días donde empezaba la reforma agraria, los campesinos entendieron que tenían oportunidad de convertirse en beneficiarios de la reforma agraria y por eso se logró movilizarlos. Luego estas organizaciones se sostenían, mediante préstamos que se les otorgaron para trabajar la tierra y así cada organización les daba un salario a sus asociados. Los salarios eran pequeños, un lempira al día primero luego se les daba un lempira con cincuenta centavos.

Los campesinos jugaron un papel muy importante porque en un proceso de reforma agraria se necesitaba la participación organizada de los beneficiarios y se requiere que las organizaciones actúen como grupos de presión.

La reforma agraria después del golpe militar de 1963


Con el golpe militar de Oswaldo López Arellano. En cuestión agraria éste tenia pendiente en su plan de gobierno Adoptar una política agraria para aumentar la productividad del sector campesino. También introducir el área rural en programas técnicos y otorgarles garantías suficientes para que sea reconocida y respetada de acuerdo con la Ley de Reforma Agraria. Una de las primeras medidas urgentes que tomo se halla contenida en el Decreto-Ley No. 8 que fue destinado a contener las invasiones campesinas a las tierras nacionales, ejidales y de propiedad privada. También existían problemas con respecto a las importaciones y exportaciones. 

Exportábamos muy pocos productos agrícolas y la mano de obra tiene muy baja productividad. Esto tiene relación con la mala distribución de tierras en las áreas rurales de nuestro país. La agricultura tampoco se podía desarrollar porque se necesitaban carreteras, medios de trasporte y lugares de almacenamiento adecuados para los cultivos. La destrucción de los bosques era tremenda, porque no había control sobre las industrias forestales. Esos y otros problemas de esa época, continúan siendo una grave amenaza a la economía y la sociedad de nuestro país. El plan contemplo la necesidad de distribuir 600 mil hectáreas entre 120 mil familias campesinas, organizadas en 1200 empresas productivas, para lo cual se emitió, el 30 de diciembre de 1974, la Ley de Reforma Agraria. En cuanto a la política forestal, fue creada la Corporación Hondureña de Desarrollo Forestal COHDEFOR, según decreto No. 103 de 10 de enero de 1974. Fue creada para aprovechar los recursos naturales y para la protección y seguridad del bosque. 

El Plan perseguía una reforma agraria impulsada por inversionistas nacionales en función de sus propios intereses. Pero esa reforma, aunque promovía cierto desarrollo de la producción y de la productividad, fue incapaz de resolver los problemas fundamentales de la población campesina.

De esta fecha se paraliza el proceso de la reforma agraria en Honduras, las organizaciones campesinas fueron reprimidas. A pesar de ese contexto desfavorable para este proceso surgió en este periodo uno de los proyectos no importantes para la reforma agraria en la zona de las guanchias, en el departamento de yoro. En este lugar los campesinos por sí mismos impulsaron la reforma agraria, presionando y tomando se las tierras detentaba la familia Bogran y tierra nacionales devueltas por la Tela R. Company al INA en 1964. Será todo imperio del enfrentamiento entre los campesinos del estado y la familia Bogran. Este conflicto se resuelve cuando el grupo de guanchias logró que el 17 de abril de 1965 el INA les autorizara ocupar 350 manzanas, en las tierras devueltas por la compañía trasnacional, para trabajarlas de formas colectivas.

Un personaje clave en este hecho fue el licenciado Rigoberto Sandoval corea quien fue ex funcionario del banco interamericano de desarrollo y nuevo director del INA en el gobierno de López Arellano. Por ello se ve que hay un mayor interés por parte de este gobierno por impulsar la reforma agraria. Luego del conflicto entre organizaciones campesinas y arrendatarios de tierra y compañías, se constituyeron algunas instituciones campesinas como la cooperativa buenos amigos, agua blanquiazul, Lourdes y nacional alianza, éstas adoptaron la forma colectiva de producción. El licenciado corea con otros líderes y cooperativas para la reforma agraria lograron impulsar la fundación de la federación de cooperativas de reforma agraria en Honduras.

También con este personaje se inicia el proyecto del bajo aguan que fue elaborado por la organización estado americanos en 1960. Este proyecto impulsaba un préstamo de 15 millones de lempiras otorgados por el Banco Interamericano de Desarrollo. Con intención de rehabilitar 6000 tareas de tierras que habían sido abandonadas por una compañía trasnacional en Honduras. Este proyecto se esperaba cultivar dichas tierras con palma africana, pero no básicos, cíclicos y también trabajar la ganadería.

A partir de 1971 política de recuperación desde tierra nacionales y que estaban siendo ocupadas ilegalmente por particulares. Esta manera surgió el proyecto agrícola y ganadero de san Bernardo que también adoptada el modelo de explotación comunitario. 

Logros de la reforma agraria


Con la reforma agraria se lograron beneficiar algunas familias campesinas, los logros materiales no fueron satisfactorios. Parece que solo un pequeño número de cooperativas productoras de banano, palma africana, y caña de azúcar fueron los sectores que lograron mejores condiciones de vida de los asociados. Se cree que la mayoría de los grupos, que en total eran aproximadamente 2200 y unas 40000 familias participantes siguieron en situación precaria. 

Lo poco que se logro significa que la reforma agraria fracaso en el país, ya que algo se logro, no de la forma que se esperaba, pero algunos grupos obtuvieron sus tierras, se trabajaba bajo un sistema de producción comunal o de grupo, así se evitaba que ellos vendieran sus tierras y que quedaran en lo mismo. Muchos de estos grupos tuvieron éxito por el motivo de que habían ganado experiencia en varios ámbitos de la producción por haber trabajado con las compañías norteamericanas. Estos logros se dieron más que nada en los cultivos permanentes como ser la palma africana, caña de azúcar, banano, etc. Esto por su alta rentabilidad.



Conclusión 
Paradigma estructuralista del desarrollo rural y la reforma agraria.
Estructura agraria de Honduras para esa época.




De entrada, observando la realidad de esa época y de acuerdo con el paradigma estructuralista para el desarrollo rural, nos encontrábamos con una estructura agraria latifundista-minifundista, donde se desperdiciaban grandes cantidades de tierra que podían ser utilizadas para mejorar la vida de los trabajadores rurales, de mejorar la economía del país, y darle más ganancia del estado. Es estructura agraria dentro de este paradigma es un estorbo para el desarrollo, En una estructura latifundista se desaprovechan los recursos naturales así como la fuerza de trabajo que por razón de esa ineficaz estructura muchos trabajadores rurales se encuentran desempleados.



Reforma agraria y el papel del gobierno


En cuanto al gobierno, de acuerdo con este paradigma que acusa a los gobiernos por su retraso en implementación de reformas grandes, en el caso de Ramón Villeda Morales se vio bastante interés por una nueva estructuración agraria, donde se redistribuyera la tierra a la población rural necesitada. Luego del golpe de estado, la presión campesina hace que Osvaldo López Arellano muestre mayor interés por una reforma agraria. Pero un factor no señalado en el paradigma estructuralista, fue el seno intereses transnacionales y su influencia sobre las decisiones políticas, quien este caso fue lo que terminó de paralizar el proceso de reforma agraria en Honduras para esa época.

Modelo estructuralista de reforma agraria y reforma de Honduras


La agricultura en la estrategia estructuralista intenta sostener el proceso de industrialización por medio de divisas obtenidas por las exportaciones y destinados a financiar las importaciones de bienes de equipamiento, piezas de cambio y materias primas que la industria exige. Oswaldo López Arellano. En cuestión agraria tenia pendiente en su plan de gobierno Adoptar una política agraria para aumentar la productividad del sector campesino, También existían problemas con respecto a las importaciones y exportaciones. Exportábamos muy pocos productos agrícolas y la mano de obra tiene muy baja productividad. Esto tiene relación con la mala distribución de tierras en las áreas rurales de nuestro país. La agricultura tampoco se podía desarrollar porque se necesitaban carreteras, medios de trasporte y lugares de almacenamiento adecuados para los cultivos. 

Otra de las propuestas estructuralistas es proporcionar un suministro constante de mano de obra barata para esa industria seguida de satisfacer las necesidades alimentarias de las poblaciones urbanas, para evitar y así evitar las importaciones, evitar también que suba de precio la mano de obra, y que los alimentos se eleven. Para esto el INA tenía como finalidad a parte de lograr la transformación de la estructura agraria del país, e incorporar la población rural al desarrollo integral de la nación, también su función fundamental era dotar de tierra al campesino y estimular la organización de los beneficiarios, que permita la adopción de tecnologías tendientes a elevar el nivel de vida, aumentar la producción, la productividad y la generación de empleo en la zona rural. 

Aparte de todo, se creo una institución para la capacitación de este sector llamado Centro de capacitación David Funez Villatoro, su nombre fue dado en honor al sargento Funez Villatoro que con sus soldados fueron encargados de dar protección a los trabajadores y campesinos que participaban en la recolección de tierras. Este sargento fue asesinado cumpliendo con su deber en las cercanías del centro.

Hay algo que no se pudo cumplir, que es una condición para el desarrollo económico para los estructuralistas que fue que no se consiguió suministrar en cantidad suficiente las materias primas baratas y alimentos accesibles para el mercado interno. No se logra tampoco el desarrollo económico esperado. El ISI se dio en el país, pero no logro levantarse, por ello no se logro el anhelado desarrollo económico del país.

Bibliografía.


-Puntos de vista/Temas agrarios, centro de documentación de Honduras.

-Ramón Salgado, Estructura y reforma agraria en Honduras.

-M. Rubén, 1977, Educación y reforma agraria en Honduras, Naciones Unidas.

-Salgado Ramón, Reforma agraria y desarrollo agrícola. 

- Salgado Ramón, La tenencia de la tierra en Honduras

- Instituto Hondureño de desarrollo rural, Programa de capacitación campesina para la reforma agraria, INA.

-Fundacion Friedrich Ebert, La reforma agraria en Honduras, Tegucigalpa D.C.

-INA - Instituto Nacional Agrario –Historia del INA, Honduras.mht

- Gobiernos militares 1956-1980_ Historia de Honduras Monografias_com.mht



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